Carlos Landívar ingresa a la empresa de transportes en la que trabajaba y se suicida, pero antes mata a sus dos jefes, a un compañero de trabajo e incendia el lugar, dijo que lo iba a hacer porque le liquidaron mal el aguinaldo. Su deseo de justicia reivindicativa esta dirigido hacia las figuras de autoridad, es probable que no haya estado en sus cabales lo que no quiere decir que no haya sido capaz de actuar de un modo metódico y organizado.
La necesidad de matar por un error en la liquidación salarial, puede sonar delirante y sobrevalorada, pero en la mente del criminal, esto es hacer justicia, el siente que tiene razón y justifica sus acciones, existe una predisposición (a cometer el crimen) y un factor precipitante, que puede ser real o no.
El factor desencadenante es un acontecimiento que hace que una persona caiga en una desestabilidad emocional frente a un hecho que lo excede y que convoca su esencia como sujeto, quizás esto fue previo a la masacre, pero este error, fue la gota que derramó el vaso. Comparto con ustedes mi análisis para C5N el 19 de diciembre de 2012.
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